Atención psicológica, ante cualquier trastorno psíquico individual, desde una perspectiva interactiva que toma como referencia sus relaciones significativas.
Terapia de pareja
Ofrece tratamiento cuando las dificultades afectan al contexto de la pareja, pudiendo darse sesiones tanto individuales como conjuntas.
Terapia familiar
Aborda todo tipo de problemas psicológicos, teniendo en cuenta el marco de las relaciones significativas o de carácter familiar de las personas. No es imprescindible que acuda toda la familia.
Terapia infantojuvenil
Cuando existan dificultades relacionadas con menores se trabajará en un formato de Terapia familiar, debido a la necesidad de contar con la colaboración de las personas responsables de su cuidado.
Entre las dificultades por las que una persona solicita atención psicológica se encuentran los estados de ansiedad y depresión, adicciones, situaciones de duelo o pérdida, trastornos alimienticios, trastornos obsesivo-compulsivos, situaciones de abuso o violencia.
Algunos problemas por los que puede solicitar terapia una pareja son celos, dependencia emocional, problemas sexuales, situaciones de separación o divorcio, conflictos comunicacionales o discusiones.
Las familias pueden solicitar tratamiento en caso de problemas de comportamiento en menores (desobediencia, rebeldía, agresividad, miedos, problemas escolares…) , conflictos en la convivencia familiar, violencia familiar, asesoramiento en casos de separación o ante cualquier dificultad que afecte a la familia.